EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

Las altas esferas nos miran con paternal complacencia. De lo que no son conscientes es de que nosotros, pequeños y escasos asteroides en plena explosión demográfica, cuando giramos a su alrededor, no lo hacemos dócilmente. Les escrutamos, les estudiamos. Una y otra vez. Aunque ya tengamos demasiado vistas sus superficies leprosas y salpicadas de chancros sifilíticos. Simplemente nos estamos reproduciendo, poco a poco. Estamos esperando el momento ideal, que acontecerá el día más pensado, cuando a la ocasión la pinten con rastas hasta la mismísima culera, para lanzarnos sobre sus sorprendidas caras. Algún día caeremos como hierros al rojo vivo sobre sus cordilleras podridas. No habrá coordinación, será una lluvia ácrata, un chubasco irregular y Aleatorio, sin una política definida. POR FIN.

Nuestros cerebros serán meteoritos de todos los colores. Eso es lo de menos. Caeremos a su derecha, a su izquierda, en sus bancos y en sus politburós. En sus templos, en sus logias, en sus sedes del partido, en sus Casas del Pueblo. Lapidaremos mentalmente sus Cuarteles Generales, sus centros de comunicaciones monodireccionales. Pianos de Jerry Lee Lewis sin teclas berreando silenciosamente "Great Balls of Fire". Eso seremos.

Pero mientras tanto, seguimos aumentando la familia. Se engrosa el cinturón. Es una batalla entre la mitosis asnal y la del pensamiento auténticamente libre.

Y se acabó el "si Dios quiere". Habremos de querer nosotros. Porque, llamadme loco, eso es lo que creo que Dios quiere: mujeres, hombres, personas actuando por sí mismos... con el pensamiento verdaderamente libre.

Firmado: una bomba nuclear tranquila.

miércoles, septiembre 27, 2006

Cállese usted, Santi, cállese

Se sorprenderían ustedes, a pesar de su innegable predominio en todo medio de comunicación que se precie, de la cantidad de bombas con metralla de excremento que pulula por la red de redes. Leyendo ese vertedero fundamentalista y antioccidental que es Webislam, me encuentro el siguiente vómito mental de un tal Santi Benítez... Pobre Santiago si levantara la cabeza y viese a este "tocayo" decir tanta payasada. He aquí su súper-artículo.
CÁLLESE, SEÑOR ANZAR, CÁLLESE
La otra noche, viendo el programa de Eva Hache, me encontré con esa frase que, además de otras lindezas de las que este pobre diablo es pródigo, hará famoso a José María Anzar como uno de los paletos más patéticos que ha tenido este país al frente del gobierno, exceptuando a aquel Paquiño, el del Ferrol, intentando hablar en inglés. Para ser exacto lo que dijo fue, textual: “... Es muy interesante ver que mucha gente en el mundo islámico reclama que el Papa pida perdón, pero no oigo a ningún musulmán que me pida perdón por conquistar España y estar allí ocho siglos...” Lo primero que me vino a la cabeza fue a ver porqué demonios tendrían que pedirle perdón precisamente a él, y lo segundo, que este tarado debería leerse algún libro de historia de vez en cuando. Bueno, él y Pío Moa, claro.

Vamos a ubicarnos para poder hacernos una idea de la tamaña barbaridad que soltó este iletrado. Hasta el año 476 D.C. la península ibérica fue romana, bajo el llamado Imperio de Occidente, aunque es cierto que sufrió las oleadas correspondientes de suevos, vándalos, alanos, etc, etc. A partir de ese momento Gallaecia, Lusitania, Cartaginiensis y Bética lo único que conocen es abandono, saqueos y destrucción. Si tenemos en cuenta que los árabes estuvieron en la península ocho siglos (800 años), resulta que durante menos de siglo, y siempre según este ignoto, la península saqueada se convirtió en “España”.Pero vayamos más lejos. Si resulta que los árabes estuvieron en la península ocho siglos (800 años), pues va a ser que los “españoles”, como tales, llevamos en ella sólo cinco siglos (514 años para ser exactos). Y llegados a este punto, yo me preguntaría seriamente a quien tendrían que pedirle perdón los árabes por la Alambra, por la mezquita de Córdoba y el palacio de Medina Azahra – esta ciudad llegó a ser la mayor ciudad de occidente con 500.000 habitantes –, por que para mi que más que pedir perdón tendríamos nosotros que darles las gracias.
Modestamente yo, fíjese usted Don Pepe Mari, le diría que se cociera una cremallera a la boquita, no vaya a ser que empiecen a mentarle a su adorada Isabel, la muy católica, que hundió la economía del país echando a los judíos que no pudo quemar y fue responsable del comienzo de un genocidio en Sudamérica en nombre de dios que no tiene parangón ni comparándolo con el nazi o el estalinista. Y me da la impresión de que ningún indio guajiro, por ejemplo, ha solicitado que se le pida perdón, por no hablar de los judíos sefardíes. Claro que cualquier componente humano de estos pueblos tiene más dignidad e historia a sus espaldas que esa “España” a la que usted defiende del “moro”, señor.
Lo peor de todo esto es que este cristiano fue presidente de nuestro país, y para ello resulta que muchos españoles le votaron. Es decir, a ver si tenemos un poquitín de cuidado con lo que ponemos en la papeleta, que al final terminamos echándolos a la calle por manipuladores y mentirosos para morirnos de vergüenza ajena al oírlos hablar por esos mundos de dios (Menos mal que por lo menos fue en los USA y allí como que perdieron la vergüenza hace ya mucho).
Suena de fondo “Carmina Potoria”.
Buenas noches, y buena suerte...
Bien, este sujeto ha ejercido libremente su libertad de expresión, con ese estilo faltón y desenfadado que caracteriza a los progresistas-mugre que asolan este país. Ahora lo haré yo, con mi estilo chachiguay que tantos éxitos me ha proporcionado, no fuera malo. Tremblez.
Santiaguiño comienza perdiendo todo tipo de credibilidad al reconocerse telespectador de ese infecto programa superenrollao y modelno que es Noche Hache, en el que arrecian los insultos hacia España, el Cristianismo y cualquier opción política de corte más o menos conservador. Yo con ver un programa tuve suficiente diarrea mental como para no acercarme más a la televisión en esa franja horaria durante 3 meses, no fuera a ser que la bella Eva Hache apareciese y me reconquistase con su dulce voz y agradable conversación.
Después, pasa a iniciar su cutreargumentación haciendo mención, cómo no, como todo buen progre, y aunque sea muy de pasada, al pérfido Caudillo, dictador causante de todos los males y opresiones sobre las naciones del Estado Español, la libertad y la democracia abanderadas por la izquierda desde octubre de 1934. Santi sigue perdiendo credibilidad, que ya está a nivel -1. Tras ello, y muy en la citada línea babosa que caracteriza a la progresía, se permite insultar al expresidente del Gobierno y emplazarlo a que lea libros de historia que no sean de Pío Moa... ¿cuáles? ¿Libros de esos tan cachondos en los que se niega la invasión, genocidio y devastación cultural de los musulmanes? ¿Libros en los que el PSOE y marxismo en general de los años 30 es visto poco menos que una ONG repartecaramelos, defensor de la democracia y el libre pensamiento? Estaría bien que hubiese mencionado alguno de los libros que recomendaría, para que la hilaridad fuese aún más profunda. Pero Santi es un tío que no quiere hacer publicidad gratuita. Tendría que haber pedido permiso a Esteban Ibarra, igual con un poco de suerte se conformaba con apenas un 30% de los beneficios. Lástima.
Pasa ahora Santi, con un estilo pseudocientífico y con cierto toque paternalista, a "ubicar" al lector no en la Historia de España, sino en su cuenterete penoso de tres párrafos en los que, pasando por alto la herencia genética, cultural, religiosa y lingüística romana sobre la cual se sustenta no ya España, sino la mayor parte de Europa Occidental, a describir ¡en una frase! la presencia de los pueblos germánicos como una era de devastación, saqueos y oscuridad. Lo cierto es que Santiaguito parece no saber, a pesar de ser una persona altamente letrada, que la Hispania Visigoda fue, junto con Bizancio, el territorio del mundo conocido culturalmente más avanzado de la época, y una floreciente nación... Tal vez este sujeto no conozca la figura de San Isidoro de Sevilla, y si la conoce, seguro que la desprecia porque el franquismo la magnificó, o alguna chorrada similar. Se pasa por el forro a Recaredo (unificación religiosa), Recesvinto (unificación jurídica), o Leovigildo (unificación territorial). Luego suelta una chorrada tal como que España sólo es España desde 1492, o al menos eso es lo que dice que cree Aznar (que relea el Cantar de Mío Cid, a ver si aparece la palabra España -esta obra se escribió alrededor del siglo XII-XIII). También habrá que refrescarle un poco la memoria a Santi: ya en 1248 los cristianos estaban en Sevilla, y si no continuaron adelante conquistando lo poco que quedaba, fue por razones económicas y tributarias. Pero esto Santi no lo sabe o no lo cita.
¡Atención, que viene lo mejor! Aparte de escribir mal "Alhambra" (oh, letrado), ¡asegura que tenemos que dar las gracias a los árabes por construir magníficos monumentos! Pues la verdad, prefiero dar las gracias a quien construyó el Escorial, la Catedral de Toledo, la de Burgos, la de Santiago de Compostela, la Basílica de San Pedro del Vaticano, la de Santa Sofía, etcétera, etcétera... ¿O es que tienen algo que envidiar a la mezquita de Córdoba? ¿Es acaso el Louvre inferior a la Alhambra? ¿Sabes, oh Santi, que la mezquita de Córdoba se erigió sobre una iglesia cristiana? No. Pues eso, casi que no merece la pena dar las gracias, por muy bellas que te puedan parecer, Santi. No compensan tantos siglos de genocidio y matanzas. Como que no.
"Modestamente", dice el bueno de Santi. Modestia es lo que le hace falta a kilos, si no a toneladas. Eso, y no una cremallera en su boca, sino una plancha de acero y tungsteno de 10 cm. de espesor, por su bien y el de la Humanidad. Su ignorancia y atrevimiento (siempre tan ligados), llega al extremo de sacar a la luz a Isabel la Católica, a la que acusa de arruinar España por expulsar a los judíos... Dios, pero qué malvada, ¿verdad? Como los musulmanes, a esos a los que hay que agradecer la "Alambra", les trataban tan bien... que le pregunten a Maimónides, y a los cientos de miles de cristianos que huían al norte, seguramente despreciando el ambiente guay y multiculti que se vivía en Córdoba, ¿eh, Santi? El catetismo y parcialidad de Santiaguete continúa, sin venir mucho a cuento, con el genocidio en Sudamérica perpetrado precisamente por la malvada Isabel, esa Isabel que reconoció a los indios como súbditos de la Corona (¡en pleno siglo XVI!), cosa que no hizo ni uno solo de los otros países europeos, por cierto, y a la que compara con dos dirigentes del siglo XX. Recordaré a Santi también que los esclavos negros llevados a América eran "seleccionados" por traficantes musulmanes. Y lo siguen haciendo. ¿Debemos agradecérselo también, Santi? Y tienes malas impresiones, chaval, porque últimamente no oigo más que reclamaciones, quejas y protestas por parte de indios como Evo Morales o Rigoberta Menchú por "el genocidio" español en las Américas. Me planteo algunas cuestiones: primera, ¿por qué siguen siendo mayoría en Bolivia, y, mestizados, la inmensa mayoría en la mayor parte de los países colonizados por España, a diferencia de los Estados Unidos o el Canadá? ¿Es que acaso los aztecas o los incas no eran auténticos genocidas? ¿Y si los aztecas hubiesen descubierto Europa? ¿Qué hubieran hecho? ¿lo mismo que con los pueblos a los que explotaban, tal vez? Claro, que cualquier componente humano de cualquier pueblo de la Humanidad tiene más cultura y menos tontería que usted, Santi.

Y Santi pone punto y final a su magistral artículo como todo buen progre que se precie, echando pestes de los Estados Unidos y justificando de la manera más penosa la derrota del PP en las urnas. ¡Ole!

Te has lucido, compañero. No suena de fondo Carmina Potoria, pero sí que me has dado ganas de potar.
Duerme bien esta noche, si puedes. Imbécil.

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