domingo, noviembre 05, 2017
IMBÉCILES DINÁMICOS
Ayer, nada más levantarme,
tuve una pesadilla horrible:
me perseguía una horda civilizada
compuesta por una abigarrada mezcla
de imbéciles dinámicos.
Fue terrorífico.
Hacía mucho tiempo
que no sentía la obligación real
de aburrirme.
Desbordado por los acontecimientos
eché a correr hacia mi casa
y hubo suerte:
cuando llegué
las sábanas aún estaban calientes
y ni tu recuerdo
ni la cafeína
pudieron mantenerme despierto
en un mundo
que el resto de los mortales
se empeña en que yo deteste,
eso sí,
siempre por mis propios miedos.
tuve una pesadilla horrible:
me perseguía una horda civilizada
compuesta por una abigarrada mezcla
de imbéciles dinámicos.
Fue terrorífico.
Hacía mucho tiempo
que no sentía la obligación real
de aburrirme.
Desbordado por los acontecimientos
eché a correr hacia mi casa
y hubo suerte:
cuando llegué
las sábanas aún estaban calientes
y ni tu recuerdo
ni la cafeína
pudieron mantenerme despierto
en un mundo
que el resto de los mortales
se empeña en que yo deteste,
eso sí,
siempre por mis propios miedos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)