Entre botellas te alzabas aquella tarde
Daba el viento y eras reina del desastre
Y adelante
Buscaré bien la toalla porque
Contigo hoy no pienso tirarla
Y encontré dos mil mañanas en tu pelo
Me pegaba algo en el pecho, miré arriba
Y no vi cielo:
Derrapaban nubes en la luna
En mis oídos todavía se escuchan
Como el yin y el yang, fundidos vamos
Confundidos, pues también, la confusión
No es un pecado
Y en nuestra hoja de servicios
No anotamos qué pueden ser vicios
Y un abrazo de hiedra
Que oculta todas mis puertas
Y no deja que me esconda
De tus vicios y virtudes
Del recuerdo de tu boca
Del recuerdo de tu boca
Que tus ramas me agarran tan fuerte
Que no hay hacha que las corte, te sonrío
Y atrapado
Me abandono a la inocencia
De quien cree que sabe y no se entera
El balance de lo perdido y ganado
El ocaso de tus ojos en mi mente
No ha acabado
Y aún comparto mis recuerdos
Con mil sueños que creía muertos
Tus hojas me acarician despacio
No sé si es savia o saliva lo que me hace daño
Yo me dejo atenazar, no ataco
Y en tus raíces construiré un palacio
Y un abrazo de hiedra
Que oculta todas mis puertas
Y no deja que me esconda
De tus vicios y virtudes
Del recuerdo de tu boca
Del recuerdo de tu boca
Entre botellas te alzabas aquella tarde
Daba el viento y eras reina del desastre
Y adelante
Buscaré bien la toalla porque
Contigo hoy no pienso tirarla
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