EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

Las altas esferas nos miran con paternal complacencia. De lo que no son conscientes es de que nosotros, pequeños y escasos asteroides en plena explosión demográfica, cuando giramos a su alrededor, no lo hacemos dócilmente. Les escrutamos, les estudiamos. Una y otra vez. Aunque ya tengamos demasiado vistas sus superficies leprosas y salpicadas de chancros sifilíticos. Simplemente nos estamos reproduciendo, poco a poco. Estamos esperando el momento ideal, que acontecerá el día más pensado, cuando a la ocasión la pinten con rastas hasta la mismísima culera, para lanzarnos sobre sus sorprendidas caras. Algún día caeremos como hierros al rojo vivo sobre sus cordilleras podridas. No habrá coordinación, será una lluvia ácrata, un chubasco irregular y Aleatorio, sin una política definida. POR FIN.

Nuestros cerebros serán meteoritos de todos los colores. Eso es lo de menos. Caeremos a su derecha, a su izquierda, en sus bancos y en sus politburós. En sus templos, en sus logias, en sus sedes del partido, en sus Casas del Pueblo. Lapidaremos mentalmente sus Cuarteles Generales, sus centros de comunicaciones monodireccionales. Pianos de Jerry Lee Lewis sin teclas berreando silenciosamente "Great Balls of Fire". Eso seremos.

Pero mientras tanto, seguimos aumentando la familia. Se engrosa el cinturón. Es una batalla entre la mitosis asnal y la del pensamiento auténticamente libre.

Y se acabó el "si Dios quiere". Habremos de querer nosotros. Porque, llamadme loco, eso es lo que creo que Dios quiere: mujeres, hombres, personas actuando por sí mismos... con el pensamiento verdaderamente libre.

Firmado: una bomba nuclear tranquila.

miércoles, abril 09, 2008

Origo Animarum Automaticarum

Cual puerta cerrándose sobre su ataúd, un negro líquido comienza a anegar la cúpula celeste. En el centro, irredenta, la blanca luna resiste en su trinchera sobre el cielo de Kivett. El silencio atronador invade el verde paraje. Los maizales se cimbrean, como largas y gualdas alabardas, frente al castillo de las Almas. En sus catacumbas, los alquimistas desarrollan, experimentan, investigan las formas óptimas para llevar a cabo la liberación e instrucción de sus adeptos de las garras del automatismo vital al que le ha llevado la decadencia social en que se han visto adheridos, suturados, soldados, desde su nacimiento. Buscan encontrar mucho más que el secreto de una piedra filosofal en la que nunca han creído plenamente, tratan de hallar el modo de liberarse de las corazas, el blindaje social que se les ha ido hundiendo en la carne de su psique a lo largo de tantos años, tantos años vegetando...

En las negras catacumbas, los alquimistas de las almas preparan su instrumental cuidadosamente, es una noche excelente para comenzar los experimentos, para que Beni decante inquietantes melodías en su guitarra-matraz, para que Terra ayude a mezclarlas y las disuelva en su teclado-alambique, para que Javiek las ponga a hervir en su bajo-marmita, para que Didacus emplee los conjuros adecuados y surta efecto:
Toh, taye, dra, lou, peng, shua, shef, auld, nu, jadh... Ethock!
Temblad aquellos que pusisteis en nuestros tobillos y muñecas las cadenas de lo mundano. En nuestra inexpugnable fortaleza, hemos logrado librarnos de ellas. No estamos ya a vuestra merced. Nunca más.

Nuestro estampido melódico se expande, se expande...
(D.S. Año 2006)

2 comentarios:

Beni dijo...

Joder, no sabía que continuará vivo tu blog... Intentaré pasarme e ir comentando.

Beni dijo...

continuará... ando guapo.
Por cierto, he colgado otra de las míticas canciones. Pásate y comenta.